lunes, 16 de junio de 2014

Descubrí el cielo el día que miré tus ojos, 
el día que besé tus labios,
el día que acaricié tu rostro
el día que sentí tu cuerpo junto al mío.

Y debo admitir que mi significado de perfección se ha quedado corto
al ver tu torso desnudo sobre mi cama;
al enredarnos piel con piel entre sábanas blancas descubrí que es el amor.

No importa que tan corta sea nuestra historia,
aprovecharé cada segundo, cada minuto,
cada hora y cada día que me ha dado la vida
para hacerte feliz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario