lunes, 13 de julio de 2015

Si decides marcharte, no te detendré, puedes irte cuando quieras, eres libre de volar. Pero solo deseo una cosa para tu vida. Si te vas, encárgate de encontrar una mujer que le guste viajar, no solo viajar, que le guste el "autoestop" y te acompañe en cada viaje, que no tema agarrar tu mano a la mitad de la carretera. Encárgate de hallar una mujer que prefiera vivir en una casa rodante antes de una vida cuadrada y estática en una casa del sur. Encuentra una mujer que te haga reír luego de hacerte enojar, que acepte tus locuras, te soporte los malos ratos, que te escriba poemas y te ame de aquí hasta por allá, así como te amo yo. Consigue una mujer que escuche tus sueños, que ame los paseos en bici, una mujer como pocas que  no le importe dormir en carpas al aire libre o en una cama que rechine siempre y cuando sea en tus brazos. Ve y encuentra esa mujer a tu medida, si no lo logras aquí estaré, siendo todo aquello que mencioné.