Un muchacho y una muchacha se enamoraron locamente decía la voz de mi madre, en aquella mezcla de sueño y delirio--. Y decidieron casarse.
Los novios siempre se hacen regalos.
El muchacho era pobre: su único bien consistía en un reloj que había heredado del abuelo.

La muchacha tampoco tenía dinero para el regalo de bodas.
Entonces,fue hasta la tienda del principal comerciante del lugar y vendió sus cabellos. Con el dinero, compró una cadena de oro para el reloj de su amado.
Cuando se encontraron, el día de la fiesta del casamiento, ella le dio a él una cadena para un reloj que había sido vendido, y él le dio a ella un pren-dedor para unos cabellos que ya no existían.